Quiero que lo encuentres aquí.
SHAKE IT OFF !
sábado, 3 de febrero de 2018
Coming soon
Espero
de este año lo mejor, hace mucho no hago este tipo de cosas, quizás sea la
facultad, el trabajo… la cabeza. En fin, espero un año próspero, lleno de cosas
buenas y a comparación del año pasado, con menos pérdida de gente querida. El
año pasado perdí gente importante para mí, creo que en realidad perdí una sola
persona pero que era para mí como… no sé, Robin para Batman? Bah, que ejemplo
idiota. Y vieron que uno se siente vacío cuando pasan esas cosas? Como que uno
estaba acostumbrado a tener a alguien en su vida que estaba para todo, todos
para uno y uno para todos… y vos tratabas de estar ahí también pero empieza a
ser ¿mala? Para alguno de los dos… quizás para ambos? Pero nadie quiere
renunciar a nada porque vieron que nos quedamos donde duele siempre, porque
creemos que siempre puede pasar algo que cambie las cosas y que por fin la vida
va a sonreír, pero no… y uno termina lastimado, y así lastima al otro… y Lisa lloró
y yo lloré, Maggie rió... todo fue una confusión. Me fui de tema, pero hice
catarsis.
Cuestión, esperemos que sea un año
bueno, un año lleno de cosas interesantes, de buenas amistades, buenos
momentos, buenos logros (aprobar dos finales en 15 días por favor dios), buenas
vibras. No sé qué más desear.
S e c r e t o S
« A
veces callamos porque confesar significa asumir los miedos. »
Los secretos nos protegen y confesarlos o no
siempre tiene consecuencia. Lo bueno de los secretos es que solo tú eres su
dueño. Y en cualquier momento puedes dar un paso adelante y cambiar el rumbo de
tu vida. Claro que no siempre se puede adivinar las consecuencias que esto
tiene en los demás.
Por eso siempre debes estar preparadx para todo.
jueves, 9 de marzo de 2017
Capítulo I
La noche estaba oscura y había muy pocas persona
transitando la calle de mi hogar, donde suele haber más movimiento que el que
estaba viendo en ese momento. Hasta podría decir que la oscuridad del cielo era
mayor debido a eso. Una sensación de profundidad me invadía.
Entré a mi casa. La luz estaba apagada, y, a pesar
del silencio extremo y el ambiente que esto provocaba no la encendí. Segundos
más tarde me arrepentí, ya que un objeto que no debía estar en su lugar hizo
que me encuentre cara a cara con el piso, muy frio debido al invierno. Pero había
algo que no estaba bien, ya que, en la caída, me topé con otras cosas que no
tenían que estar ahí tampoco. Me repuse y encendí la luz.
Era un desorden. Mis libros, mi colección de CDs,
todo. Luego de ver también que había objetos muy extraños que no eran de mi
pertenencia, no pude hacer otra cosa que llamar a la policía… pero de nada
sirvió. Llamé una vez tras otra, pero nadie me atendía. Supuse que esa
tranquilidad inusual de la calle tenía algo que ver con el desorden, las
llamadas sin respuestas. Había algo que no estaba bien ¿En mi casa, en mi
calle, en el barrio?
Me di cuenta que había estado parada durante una
hora en el mismo lugar intentando contactar a la policía. Decidí ir a mi
habitación y revisar si estaba todo en orden. Y así lo encontré. Pero en la
cama me llamó la atención una pequeña tarjeta de color rojo que me transmitió
una sensación muy extraña al verla. La agarré, la di vuelta, y ahí se leía:
“Ya sabes qué te falta”
“Ya sabes qué te falta”
La luz del living se apagó.
miércoles, 8 de marzo de 2017
Extraño como se reía con mis giladas, extraño el amor
que tenía en los ojos cuando me miraba, extraño nuestro secreto…
Extraño su risa, su voz, extraño hasta cuando discutíamos
y terminábamos pidiéndonos perdón
Extraño sus besos, extraño que me de la mano, sentir
que había encontrado mi lugar
Extraño el calor que desprendía, extraño como me
llenaba de besos la cara y después me abrazaba a la par de que me decía que era
sólo yo
Extraño… en definitiva, te extraño
domingo, 12 de febrero de 2017
Por los viejos tiempos
“Es una de esas noche donde en
otro tiempo hubiera estado encerrada entre tus brazos, ahora dormís solo, yo
también, sin embargo el recuerdo quedó, quizá algún día vuelva a ser real y no
sólo un recuerdo nuestro.”
Hoy volví a estar entre tus brazos, me
abrazaste con fuerza, repetiste mil veces que me amabas, que me extrañabas,
pero nos hacemos mal y lo sabemos. Cuando estamos juntos el mundo se para, hoy
lo entendí. Y si… ¿nos hacemos mierda? y si… ¿nos destrozamos y nosotros
mismos nos curamos?
Te amo, pero te amo siendo libre, viví,
quiero verte triunfando, llegando lejos, voy a estar siempre orgullosa de vos y
como vos dijiste hace un tiempo mirándome, te amo tal y como sos, somos para
siempre.
Creo que nosotros
mismos buscamos estar mal, hay veces que las cosas van realmente bien y eso nos
asusta, necesitamos tener miedo de algo, necesitamos sentirnos a la deriva, si
no... ¿por qué cada vez que todo marcha como uno siempre se lo imaginó empieza
a buscarle bajas? ¿A buscarle defectos? Los cambios son algo natural en la
vida, todo el tiempo se está cambiando, si no es de ropa es de pensamiento, si
no es de pensamiento es de actitud, de forma de ser… ¿por qué cuando llegan nos asustan
tanto? ¿Por qué nos cuesta tanto tomar decisiones
que nos den un giro 180°? Nos cuesta dejar, nos cuesta cambiar, nos cuesta
tomar decisiones que nos hagan enfrentarnos a algo nuevo en la vida, que nos
hagan tener que dejar las viejas costumbres para cambiarlas por nuevas
costumbres que, probablemente, en algún momento vuelvan a ser viejas costumbres
para ser reemplazadas por nuevas.
TENEMOS QUE
ACOSTUMBRARNOS A LOS CAMBIOS. Si no lo hacemos ¿cómo enfrentar un cambio de
trabajo, de lugar de estudio, de vivienda, de pareja, amigos, de todo…? Siempre van a ser situaciones
cotidianas de la vida, no podemos permitir que nos asusten así.
¿Te acordas...?
¿Te acordas cuando te gritó a la cara que no te quería
perder? ¿Cuántas veces te pidió perdón por creer que no era lo que vos querías
ver? ¿Te acordas cuando muerta de miedo te pidió perdón porque pifió? ¿Te
acordas como se torturaba por el error que cometió gracias a tu falta de
atención? ¿Te acordas cuando te contó su pasado, ese que tantas veces volvió y
la lastimó? ¿Te acordas como te sonreía y con esa luz en los ojos te decía que
te quería? ¿Te acordas cómo miles de veces fue contra el mundo por vos y en
cada una de ellas un poco más se rompió? ¿Te acordas todas esas veces donde
sólo ella te apoyo? ¿Te acordas cuando lloraba porque estaba desilucionada? ¿Te
acordas de como soportó tus idas y vueltas a pesar de lo mucho que le dolían?
¿Te acordas cuantas veces le dijiste que hasta ahí llegaban, te acordas cuántas
veces fueron las que lloraron? Porque estoy segura de que fueron demasiadas
como para ser contadas. Te acordas cuando creíste amarla, cuando la reclamaste
tuya, porque así la sentías, porque así la veías, los gemidos se escapaban, su
risa no tardaba en llegar por alguna estupidez que habían hecho mal, los besos
calientes de acá para allá y cada latido marcando un principio y un final, ¿te
acordas? ¿Te acordas cómo fue perdiendo fuerza, cómo de a poco iba cayendo en
la triste realidad de quién amaba más? ¿Te acordas cómo te pedía que le digas
la verdad porque así no podía más? ¿Te acordas lo cansada que estaba? Lo vacío
que se sentía eso… como
no te importaba el amor que te tenía, o lo que dabas a pensar.
¿Te acordas como se empezó a alejar? ¿Te acordas el
ruido asqueroso que hizo para que te des cuenta de que no te quería soltar?
¿Los gritos que pegaba para que veas que, a pesar de todo, todavía se quería
quedar? Cómo lloraron juntos… Decime si te acordas de cómo pataleo, lloró y creo un
ruido ensordecedor esperando que le pidas que se quede, pero tristemente eso
nunca paso. Decime si te acordas, si te acordas de cuanto se cansó de fallarse
a si misma para no fallarte a vos, de cuando se cansó de hacer un ruido que era
escuchado por todos menos por vos, cuando bajó los brazos y se sacó la venda.
Por favor, más que nada contanos que sentiste cuando
la viste sonreír y el motivo no eras vos, contame que se sintió verla de la mano
con alguien más, verla llena de vida, llena de esa luz que hace tiempo no
tenía. Decime, decime qué sentiste cuando entendiste eso de “uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, o hasta
que ve que alguien más lo tiene”.
lunes, 8 de agosto de 2016
lunes, 14 de marzo de 2016
It's over

Buenas tardes a
todos. Primero que nada gracias por dejarme ser yo quien lea estas palabras en
nombre de todos los compañeros acá presentes.
Hoy este acto
marca el fin de uno de los caminos más importantes que hemos tenido, y en este
final todos compartimos la alegría por haber conseguido lo propuesto seis años
atrás.
Durante estos
años hemos acumulado experiencias, momentos, recuerdos, en cada lugar de
nuestra escuela, en sus clases, en los pasillos, en el bufete, y la verdad que
todos ellos nos acompañarán para siempre. Quién no recordará el primer día de
clase con la espera de conocer a algún compañero nuevo…
Cada uno de
nosotros ha dejado su propia marca, ya sea por una presentación en una clase,
por una respuesta que dio a una pregunta de un profesor, por esa nota que sacó
en una asignatura, o lo más importante, la huella que nos hemos dejado los unos
a los otros, simplemente por el hecho de habernos conocido. Y cómo el hecho de
conocer mejor a unas personas en los últimos pocos meses o años, te hace que no
las olvides nunca y que siempre las lleves contigo.
Cómo olvidarnos
de nuestros profesores que, más allá de qué tan complicada sea la materia o
cómo sea nuestra relación, siempre estuvieron ahí para cada uno nosotros ya sea
en lo escolar o en lo personal. Porque si se quiere podríamos decir que somos
unos cholulos o mejor dicho unos impresentables, que no se explica cómo vamos a
salir al mundo porque en la facultad nos van partir como un queso. Y cuando
estemos en las respectivas aulas y venga un hombre y nos diga simplemente
“Buenos días”, nada de venir con una sonrisa y chupetines a alegrarnos las
mañanas con un “Hola ¿Qué tal? ¿Cómo le va?” Porque el nivel de mamarracho de
esta promoción es increíble. Cómo olvidarnos de la cantidad de porqués a contestar
en historia, cuando una decía “Ya está, me fue bien” y cuando veías la
corrección eran todos “¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?”. Cuando en las clases de
gimnasia y te tomabas un remis para alcanzar la pelota o realmente, estabas
peor que Botinelli. Físicamente, les puedo decir que Popu y Titi son los
gatitos más lindos que existen. Aprendimos, también, que cuando nos acostamos
en la camini actuamos que dormimos hasta que lo hacemos finalmente. Igual,
digan lo que digan, no me queda ninguna duda de que después de tanto tiempo
aprendimos a reprimir nuestra estupidez en literatura para largarla en el
recreo.
Y por supuesto
aquellas personas que nos han ayudado tanto en este arduo camino, personas que
han ayudado a que esta etapa haya sido mucho más fácil y que nos han apoyado en
momentos difíciles, y que nos dieron un empujón cuando lo necesitábamos… me refiero a nuestras familias, que en cada
caso serán nuestros padres o hermanos, abuelos, tíos, primos… simplemente queremos
darles las gracias por el apoyo y la confianza brindada.
Llega el momento
de despedirse, de dar un salto grande y pasar a otra etapa. Todo este tiempo
nos permitió pasar de ser niños a adolescentes, para hoy ser unos pequeños
adultos. Nuestras vidas inevitablemente cambiarán, pero lo que creo que nunca
va a cambiar es el sentimiento que tenemos ahora, la adrenalina de enfrentarnos
a una nueva etapa que no conocemos. Tomémonos un rato para mirar a nuestros
compañeros, no sabremos si el día de mañana continuaremos todos juntos o sólo
seremos parte una etapa, lo único que tenemos es la certeza de que
representaron la mejor parte de nuestra vida… nuestro crecimiento. Y gran parte
de lo que seamos el día de mañana, se lo debemos a cada uno de los que hoy
están con nosotros y nos han acompañado en este gran camino.
Gracias.
Perder a alguien. Cuando
sabemos que alguien está ahí simplemente le dejamos estar, quizás no le damos
la suficiente atención porque está ahí obvio... hoy, mañana, pasado, cuando
sea. Pero si supieras que un día va a irse probablemente lx aprovecharías al máximo,
harías todo por verlx. Pero si pensamos, vos sabes que algún día va a irse,
solo no tenes la exactitud de saber cuándo va a ser eso, entonces, por qué no
lo aprovechas? Por qué dejamos estar las cosas y simplemente cuando se van
decimos "me hubiera gustado compartir más cosas"? Por qué somos así?
Simplemente no lo aceptamos y es lógico, quién quiere aceptar que eso que uno
tiene va a dejar de estar?
miércoles, 13 de enero de 2016
A veces
me gusta adueñarme de la ciudad, caminar por calles desérticas y encontrar
evidencia de alguien que estuvo ahí antes que yo, darme cuenta lo pequeñísima que
soy no solo en el universo sino en el propio barrio, llegar a la conclusión –
tal vez evidente – de que nada es nuestro, nada es mío y eso me encanta ¿Por
qué poseer cuando puedo, simplemente, disfrutar? Creo que sólo soy dueña de mis
recuerdos pero incluso ellos son dueños de sí mismos y se reconstruyen m no tienen sentido de permanencia –
claramente, mucho en común tenemos. Largar caminatas y profundos pensamientos es,
probablemente, sinónimo. Lo bien que me hace caminar y perderme, encontrar
nuevos caminos, descubrir nuevas cosas, siento que me conozco un poquito más
cada vez que camino
lunes, 23 de noviembre de 2015
jueves, 27 de agosto de 2015
Logré comprender que la vida puede ser representada como un viaje en tren con muchísimas estaciones y que hay gente que nos va a acompañar en algunas de ellas, otras en varias, algunos en muchas y pocos en todas. Esta estación que hoy vivimos representa la secundaria y va a llegar a su fin a fin de año. Todo este tiempo nos permitió pasar de ser niños a adolescentes para hoy ser unos pequeños adultos que todo padre quisiera tener. Estamos llegando a la siguiente estación. Nuestras vidas inevitablemente cambiarán, pero lo que creo que nunca va a cambiar es el sentimiento que tenemos ahora, esta adrenalina de enfrentarnos a una nueva etapa que no conocemos. Tomémonos un rato para mirar a nuestros compañeros en esta estación, observemoslo, intentemos adivinar que piensa. No sabemos si el día de mañana continuaremos viajando juntos o serán parte de alguna estación... solo tendremos la certeza de que representaron la mejor parte de nuestra vida, nuestro crecimiento y gran parte de lo que seamos el día de mañana, de nuestra formación se lo debemos a cada uno de los que hoy están con nosotros.
lunes, 3 de agosto de 2015
“Si
puedo, puedo hacer esto por nosotros, okey? Porque incluso si esto no funciona,
incluso si todo se va al infierno, incluso si soy miserable y estoy solo… la
menor posibilidad de tener una vida perfecta contigo es infinitamente mejor que
una vida sin ti. Porque algo se, te quiero y te querré hasta que tome mi último
aliento en esta tierra”
jueves, 2 de abril de 2015

lunes, 23 de marzo de 2015
Creo que este va a ser un
buen año. En lo que a mí respecta voy a tener un año con altas y bajas. Va ser
emocionante si lo vemos desde el punto que es mi último año de colegio, mi
viaje y mi fiesta de egresados, mi entrega de diplomas, mi graduación y
probablemente un intento, fallido o no, de entrar a la facultad mientras todo
lo dicho anteriormente tiene su tiempo de transición. Así como también va a ser
malo pensar como toda esa gente que hizo maravilloso tu camino por la etapa más
linda de tu vida se va dispersando, va siguiendo su camino y probablemente a la
mayoría los encuentres nuevamente recién en esa juntada de reencuentro “Egresados 2015, escuela Juan Manuel de Rosas”
que te aparece como evento en facebook a los cuarenta años. Es increíble, todos
los años de la secundaria pensé en lo mucho que quería crecer, terminar el
colegio, empezar la facultad, estudiar por fin lo que a mi me gustara y no lo
que me decía el Ministerio de Educación, trabajar y gastar mi sueldo en lo que
quisiera. Ahora que me doy cuenta no va a ser así, voy a perder (supongo, capaz
sí, capaz no) a mucha gente importante, voy a estudiar una carrera que me gusta
pero con cincuenta materias que probablemente me gusten diez, voy a trabajar y
mi sueldo lo voy a tener que guardar para poder progresar y ya no voy a poder
aplastar el culo en la cama pensando que escribir para no dejar en banda este
tipo de espacios.
Un miedo que siempre tuve es el de no poder lograr tener todo lo que me propongo en la vida, siento que voy a tener que pasar internada en el trabajo para lograr que eso pase y eso podría desgastar la relación que llegue a formar para ese momento.
A los quince años me dijeron “aprovecha todo el tiempo que te quede sin obligaciones reales porque se pasa muy rápido y la próxima etapa es muy complicada” a lo que obviamente me reí. Definitivamente creo que mis quince años fueron ayer y no puedo caer que fueron hace casi tres años ya. Bueno, en fin, espero que este sea un año ameno, que salga bien por lo menos un 70%, que pueda lograr todo lo que me proponga y si no por lo menos me encamine para hacerlo. Espero terminarlo de la mejor manera, como empezó.
Un miedo que siempre tuve es el de no poder lograr tener todo lo que me propongo en la vida, siento que voy a tener que pasar internada en el trabajo para lograr que eso pase y eso podría desgastar la relación que llegue a formar para ese momento.
A los quince años me dijeron “aprovecha todo el tiempo que te quede sin obligaciones reales porque se pasa muy rápido y la próxima etapa es muy complicada” a lo que obviamente me reí. Definitivamente creo que mis quince años fueron ayer y no puedo caer que fueron hace casi tres años ya. Bueno, en fin, espero que este sea un año ameno, que salga bien por lo menos un 70%, que pueda lograr todo lo que me proponga y si no por lo menos me encamine para hacerlo. Espero terminarlo de la mejor manera, como empezó.
jueves, 26 de febrero de 2015
domingo, 25 de enero de 2015
viernes, 23 de enero de 2015
Es sabido que cuando uno
siente que las cosas no pueden ir mejor
o que por lo menos está viviendo un estúpido equilibrio vital, todo tiende a
desmoronarse casi instantáneamente. Es así, una regla, una estúpida
consecuencia de la conciencia. Porque quizás uno al pensarlo se está llenando
de miedo la vida y se está abriendo al mismo tiempo a las malas vibras.
Tengo la alucinación de que cuando uno es ignorante de su propia felicidad, puede conservarla mucho más tiempo y en mejor estado.
domingo, 18 de enero de 2015
Porque 1+1 no siempre son 2, porque el
blanco puede ser negro, porque el negro es la mezcla de todos los colores,
porque lo más fácil no siempre es lo acertado, porque lo complicado a veces es más
atractivo, porque lo atractivo no siempre tiene que ser bonito, porque un
"no" a veces es un "si", y un "si" a veces es un
"no" escondido, porque no es oro todo lo que reluce ni plata todo lo
que no brilla, porque comer a veces no te quita el hambre y dormir no significa
que descanses, porque estar rodeado de gente no significa estar acompañado,
porque se puede soñar despierto, porque la gente cambia, y tú cambias con
ellos, que la inmensa mayoría no son lo que aparentan, lo acabaras viendo y
aceptando con el tiempo. Porque a veces los ojos hablan más que millones de
palabras, y porque a veces los silencios son mucho más que las palabras.
Las opiniones de los demás
Hay una serie de factores que
influyen las opiniones que alguien pueda tener acerca de nosotros: Sus
visiones de cómo funciona el mundo, su pasado, sus experiencias, sus prejuicios,
sus miedos, etc.
Cuando alguien nos da su opinión
acerca de nosotros o algo de lo que estamos haciendo, reaccionan a elementos que tienen significado para ellos, pero lo verbalizan en una frase
general que tenga significado para nosotros. Cuando alguien nos da su
opinión acerca de nosotros o algo de lo que estamos haciendo, su opinión
realmente tiene más que ver con ellos que lo que tiene que ver con
nosotros. Cuando alguien nos da su opinión, crea una ventana psicológica
para que su percepción se palsmee en nuestra realidad.
Esto es igualmente cierto para
los comentarios tanto positivos como negativos. Pero los comentarios negativos
siempre causan más impresión. Y se pueden desencadenar 1 de 2 situaciones:
PRIMERA: dependiendo del impacto que
cause un mensaje en nosotros (o de cuánto estábamos buscando o temiendo un tipo
de respuesta) usualmente los internalizamos. Olvidamos que originalmente eran
las palabras de alguien más y nos las empezamos a decir a nosotros mismos, pero
ahora con nuestra propia voz.
Esta, muchas veces se vuelve nuestra voz maligna interna, fantasmas de niñez, o
una voz de alerta en esteroides. Es la voz que nos dice: No. No puedes. No eres
suficientemente bueno. Nadie va a venir a tu fiesta de cumpleaños. No olvidarás
a tu primer amor. Eres egoísta. Nunca tienes nada en orden.
Es la voz que nos da miedo y nos
amarra… la que no nos deja seguir adelante.
SEGUNDA: dependiendo de las emociones
que evoque un mensaje en nosotros (de cuánto nos moleste o nos perturbe) usualmente
tratamos de desmentirlo. Permitimos que un comentario cambie el enfoque de
nuestras intenciones y motivaciones originales- para poder probarle a alguien
que Sí. Ves que sí podía hacerlo.
El problema es que agarramos el
comentario de alguien y lo convertimos en un reto que nos hace reaccionar,
cuando al principio nuestra motivación era personal y nuestro éxito sería
nuestro también- no un "Te lo Dije" para alguien más.
Ambas situaciones son igualmente
lastimosas y evitables. Es difícil evitarlas, pero ese es el reto de a través
del razonamiento ser mejor que nuestros impulsos y nuestras reacciones.
Es imperativo evitarlas porque
primero, la mayoría de las veces las otras personas no han pensado a
profundidad las opiniones que emiten y no tienen NI IDEA de la trascendencia
que sus comentarios pueden tener.
Segundo, porque tenemos que procurar
siempre permanecer conectados con nosotros mismos- con nuestro instinto, con
nuestras motivaciones.
Que sean sueños o miedos los que nos
hagan actuar, pero que sean nuestros.
No digo que no hay que escuchar los
consejos ni las guías de los demás. Pero take them with a grain of salt. Que
su alcance esté limitado al universo de la situación en la que se pronunciaron.
Son opiniones de otros humanos que
tienen tantos miedos y tantos sueños como nosotros.
Que sea tú opinión la que valga
más.
Asímismo, tengamos en mente el
impacto que nuestras opiniones pueden tener en los demás. Y escojamos
prudentemente nuestras palabras y apropiadamente los momentos para
intervenir.
Aquí estamos todos tratando de
encontrar (y formar) nuestros caminos.
No seamos obstáculos en el camino de nadie más.
Más importante aún, no seamos el obstáculo principal de nuestro propio
camino.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)