miércoles, 10 de octubre de 2012


 -Te odio.
-¿A mí?
-¡Si, te odio, te odio, te odio!
-Pero, ¿Por qué? ¿Hice algo?
-¿Si hiciste algo? Primero, tenes esa sonrisa que me mata, me miras
 con esos ojos que hacen que tenga que sonreír aunque no quiera, aunque esté enojada... Tenes esa mirada, esa mirada que no puedo sacar de mi mente y me vuelvo completamente loca. ¿Y sigues teniendo el valor de decirme que que hiciste? Hiciste que seas la persona por lo que lo dejaría todo en un instante, hiciste que seas una de las personas más importantes de mi vida, hiciste que te ame como no ame nunca ha nadie, e hiciste que cuando te vea solo quiera quedarme contigo. . .

No hay comentarios:

Publicar un comentario